sábado, 15 de septiembre de 2012

Terapias complementarias para dar la vuelta a un bebé

Estas terapias pueden ayudar a un bebé posterior o de nalgas a darse la vuelta. Si tienes alguna duda consulta a un terapeuta cualificado.

ACUPRESIÓN:

La estimulación de los puntos de acupuntura, situados en el borde exterior de los dedos pequeños de los pies, junto a las uñas, hace que los bebés se muevan más y por lo tanto suele ayudarles a dar la vuelta. Aprieta con firmeza los puntos de acupuntura con el dedo índice o el extremo plano de dos bolígrafos durante diez minutos dos veces al día. Pueden hacer falta hasta diez sesiones.


HOMEOPATÍA:

Para dar la vuelta a un bebé de nalgas, un homeópata puede sugerir una dosis de Pulsatilla 200 en la semana treinta y cinco, y una segunda dosis dos días más tarde. Para tratarte tú misma, prueba con una dosis de Pulsatilla 30 cada dos horas después de la semana treinta y cinco un solo dia, tomando seis dosis como máximo. Se puede adquirir en farmacias sin receta. Si no estas familiarizada con los remedios homeopáticos pide consejo a tu farmacéutico.


MOXIBUSTIÓN:

Los acupuntores suelen recomendar moxa, una hierba que se quema lentamente. (*). Póntela sobre los puntos de acupuntura para que caliente la piel sin quemarla durante diez minutos dos veces al dia, un máximo de diez días. De este modo se alteran los niveles de algunas hormonas, pero no se si sabe si esto hace que el bebé se dé la vuelta o si es el resultado de los movimientos que realizan.


JENGIBRE:

Los chinos afirman que dan la vuelta al 75% de los bebés de nalgas con tratamientos de jengibre. Ponte un trozo machacado de raíz de jengibre en los puntos de acupuntura todas las noches y sujétalo con un esparadrapo. Para hacer una masa, trocea o ralla la raíz, cuécela con un poco de agua, cuélala y pásala por un tamiz.


Si te inclinas hacia delante, la gravedad ayudará a tu bebé a girar la columna vertebral hacia la parte delantera de tu cuerpo. Si te inclunas mucho hacia atrás, tu bebe puede ponerse de espaldas; y si cruzas las rodillas no tendrá sitio para darse la vuelta. Si tienes algun problema de movilidad intenta adoptar estas posturas:

Sentada:

Ponte hacia delante inclinando la pelvis con las rodillas separadas, y más bajas que las caderas, para que tu bebé tenga espacio para darse la vuelta. Coloca dos almohadas en una silla recta para levantar las caderas, o siéntate al revés apoyándote en una almohada. Ponte cojines en la parte inferior de la espalda para conducir o relajarte en una butaca. Utiliza una silla ergonómica para que parte de tu peso descanse en las rodillas.

De pie:

Con la espalda derecha, apóyate hacia delante desde las caderas donde sea posible para que la gravedad atraiga la columna vertebral de tu bebé hacia la parte delantera de tu cuerpo. Para que te resulte más fácil, pon una caja sólida delante de tu cocina o fregadero.

Tumbada:

Túmbate sobre el lado izquierdo en la cama, en el sofá o en el suelo cuando veas la televisión para que la gravedad atraiga la la columna vertebral de tu bebé hacia el lado izquierdo de tu útero. La forma del útero y la disposición de sus órganos internos hacen que haya menos posibilidades de que un bebé que está a la izquierda se de la vuelta hacia atrás.

Para un bebé en una posición posterior:


  • Mantén las rodillas más bajas que las caderas y evita cruzar las piernas.

  • Arrodíllate en el suelo para leer, jugar con tus hijos, recoger juguetes o limpiar el suelo.

  • Arrodíllate en un cojín, apóyate hacia delante sobre una silla, una pelota grande de goma o tu pareja y gira las caderas durante diez minutos varias veces al dia.

  • Mécete rítmicamente en una silla o una pelota de goma durante media hora dos veces al día.

  • Haz un hueco en un cojín grande para tu vientre y apóyate hacia delante sobre él. Esto puede resultar cómodo por la noche. También puede ayudar una cama de agua y nadar boca abajo (*).

Para un bebé en una posición oblícua:


  • Si tu bebé se encuentra en diagonal en tu útero o cambia de posición con frecuencia después de la semana treinta y seis, puedes probar esta técnica:

Túmbate boca arriba sobre una toalla de baño colocada a lo ancho. Coloca una toalla de mano enrollada a cada lado de tu vientre. Ponte alrededor la toalla de baño para sujetar las toallas de mano y pide a alguien que la ajuste con imperdibles desde abajo. Al ponerte de pie la presión puede hacer que tu bebé adopte una posición vertical.

Texto extraído desde "Elige cómo deseas dar a luz", de Gill Thorn, Ed. Oniro.



(*): También puede realizarse la moxibustión con la brasa de un cigarrillo, pero entonces es necesario hacerlo al aire libre.

Para la natación, resulta menos cansado si nadas con una pala de esas que flotan, siempre boca abajo y relajada, flotando.

En el caso de que nada de esto funcione, puedes plantearte realizar una versión externa, un procedimiento para dar la vuelta al bebé y colocarlo cabeza abajo manipulando el vientre de la madre.

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Nota: Éste no es un blog médico, sino informativo. Contrasta siempre toda la información y consulta a varios especialistas. Si te llevas este artículo, por favor, enlázame.

sábado, 1 de septiembre de 2012

Lactancia materna: LO QUE HAY QUE SABER


Existen sólidas bases científicas que demuestran que la lactancia materna es el mejor alimento que una madre puede dar a su hijo recién nacido. No solo considerando su composición, sino también por el vínculo afectivo que crea y la protección que brinda frente a numerosas enfermedades.

Imagen cedida por Eva Galan. Todos los derechos reservados.
"La OMS recomienda el calostro (la leche amarillenta y espesa que se produce al final del embarazo) como el alimento perfecto para el recién nacido, y su administración debe comenzar en la primera hora de vida. Se recomienda la lactancia exclusivamente materna durante los primeros 6 meses de vida. Después debe complementarse con otros alimentos hasta los dos años."
Organización Mundial de la Salud (OMS)
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Academia Americana de Pediatría (AAP), el Comité de Lactancia de la Asociación Española de Pediatría (AEP) recomienda la alimentación exclusiva al pecho durante los primeros 6 meses de la vida del niño y continuar el amamantamiento junto con las comidas complementarias adecuadas hasta los 2 años de edad o más. En esta línea, Carlos González (pediatra) nos indica que la edad normal del destete está entre los dos años y medio y los siete.

Al principio el bebé tiene el estómago del tamaño de una canica y sólo puede digerir el calostro (agua rica en proteínas, sales minerales y factores inmunológicos). Después éste se va enriqueciendo con lactosa y lípidos hasta dar lugar a la leche definitiva. La leche de la madre se va haciendo más completa al ritmo de las enzimas del bebé. Es por tanto el organismo el que aumenta o disminuye las enzimas según sus necesidades, un desajuste en este proceso (o dar leche de fórmula) es el que provoca intolerancia infantil a la lactosa. 

En ocasiones, las madres deciden que darán el biberón incluso antes de que nazca su bebé, unas por falta de información, otras por falsos mitos inculcados. En otras, abandonan la lactancia frustradas dudando de su capacidad para lactar, de la de su bebé para mamar o de la cantidad de leche que producen. Muchas porque no tuvieron apoyo que les acompañara, enseñara y guiara. Es necesario conocer algunas cosas antes de tomar una decisión tan importante y de privar a nuestro bebé y a nosotras mismas de todos los beneficios que la Lactancia Materna conlleva, para que, sea cual sea la decisión que tomemos, sea una decisión informada y no condicionada por una falsa información o falta de la misma.

La lactancia materna es  una manera de evitar riesgos, más allá de conseguir innumerables beneficios:
Si tenemos en cuenta que lo normal es la lactancia materna y si miramos el % de bebés que se ven afectados por determinadas enfermedades en mayor medida a causa de no ser amamantados, entonces quizá deberíamos redefinir el concepto y hablar, directamente, de los riesgos directos a los que exponemos a esos bebés no alimentados al pecho, más allá de todos los beneficios que, además, no les damos. Porque una cosa es todo aquello en lo que la lactancia materna favorece tal y como le corresponde en su papel de alimentación normal e ideal, y otra diferente los riesgos a los que vamos a exponer voluntariamente a ese bebé como consecuencia directa de no ofrecerle el alimento que necesita. 
Una muestra de ello es la nueva investigación que sugiere un retraso en la maduración del sistema inmune de los bebés alimentados con fórmula.
Con un ejemplo quizá se vea mejor: La carencia de vitamina B12 causa anemia, la carencia de vitamina E causa esterilidad, abortos, distrofias musculares y degeneraciones nerviosas, la falta de vitamina C causa escorbuto, la falta de vitamina D causa raquitismo... y la falta de leche materna puede causar en el bebé catarros, bronquiolitis, enfermedades respiratorias, diarreas, infecciones, muerte súbita, neuroblastoma, Enterocolitis Necrotizante, meningitis, asma, alergias, dermatitis atópica, intolerancias, obesidad, diabetes, enfermedad de Crohn, colitis ulcerosa, arterioesclerosis, infarto de miocardio o leucemia. Todo esto, sin mencionar las muertes directas por el consumo de leche de fórmula intoxicada (ver noticias al final del artículo).
Nuestras elecciones tienen consecuencias, y hemos de ser conscientes de ellas para escoger informada y objetivamente.

¿Crees que la leche de fórmula es saludable o que no hay 'nada malo' en darle un biberón a un bebé? Bien, entonces te interesa leer esto, esto, esto, esto y esto.
Además puedes leer las noticias al pie del post donde encontrarás varios enlaces que hablan de lo que sucede cuando, además, se da un error en la fabricación (algo que obviamente no ocurre con la leche materna). Si además quieres datos más 'oficiales', puedes leer, desde IBFAN (International Baby Food Action Network) los "Riesgos de la alimentación con leche artificial" I, II, III, IV. ¿En inglés? También: 1, 2, 3, 4, 5.

 (Click sobre la imagen para ampliar)

BENEFICIOS PARA LA MADRE
  • Favorece la relación de apego con el bebé, se establece un diálogo íntimo a base de sonrisas, miradas, caricias.
  • Dar de mamar es una experiencia gozosa y única que ayuda a vivir la maternidad en plenitud. Disminuye las posibilidades de depresión postparto y ayuda a sanar partos traumáticos.
  • Ayuda al útero a contraerse y recuperar su forma más rápidamente, disminuyendo el sangrado postparto y el riesgo de hemorragia.
  • La grasa acumulada en el cuerpo durante el embarazo se convierte en energía para producir leche con lo cual se recupera el peso o la silueta.
  • Mejora la anemia y se ahorra hierro gracias a la ausencia de la amenorrea prolongada, favoreciendo además el espaciamiento natural en los embarazos gracias a sus propiedades anticonceptivas mientras la lactancia es exclusiva y a demanda.
  • A largo plazo disminuye el riesgo de cáncer de pecho, de ovarios, de útero y la osteoporosis.
  • Protege a la madre frente al riesgo de infarto, de diabetes mellitus, o de esclerosis múltiple
  • La leche materna además es estéril, antiséptica, está siempre lista para el bebé en cualquier lugar y momento, a la temperatura correcta, incluso a mitad de la noche y además es gratis.
  • Es cómodo pues la leche siempre estará a punto: temperatura adecuada y composición perfecta, y no habrá que comprar ni esterilizar tetinas ni bibes, ni estar pendientes de que no falten los polvos o el agua hervida o embotellada, y no será ningún problema cuando falten la luz o el gas.
BENEFICIOS PARA EL BEBÉ
Puedes consultar el resto de enfermedades aquí, en su artículo 'Lactancia materna y su uso' de la Revista oficial de la Academia Americana de Pediatría; en este enlace, de la revista 'Obstetrics & Gynecology', sobre los riesgos de NO amamantar para madres y bebés o este otro, sobre los riesgos de no amamantar para las madres y los bebés, de NCBI -National Center for Biotechnology Information-. Quizá prefieras comprobar las enfermedades que evita la leche materna en la Academia Americana de Pediatría o en la Asociación Española de Pediatría.
(Al final del artículo tienes más enlaces) 

La leche materna contiene todo lo que el niño necesita durante los primeros meses de vida, ¡incluso células madre!

Las células madre son células que se renuevan de forma ilimitada y que pueden convertirse en varios tipos de células diferentes y específicas.





Un recién nacido sano no necesita más líquidos que los que obtiene de la leche de su madre, no es necesario ni recomendable ofrecer agua ni soluciones de suero glucosado, zumos, agua ni papillas. La cantidad se ajusta a lo que el niño toma y a las veces que vacía el pecho al día. La calidad también varía con las necesidades del niño a lo largo del tiempo: durante los primeros días, la leche es más amarillenta (calostro, que comienza a producirse a mitad del embarazo) y contiene mayor cantidad de proteínas y sustancias antiinfecciosas (anticuerpos maternos y protección frente a la ictericia); posteriormente aparece la leche madura, que es más líquida al principio de la toma, para que salga, calme y quite su sed rápidamente, y más densa y calórica al final para que tenga un mayor aporte nutricional y lo sacíe, por todo ello es importante vaciar un pecho antes de comenzar con el otro. El estómago de un recién nacido es del tamaño de una canica, por lo que las dosis pequeñas de calostro están diseñadas especialmente para nuestro bebé. Son fácilmente digeribles y sus propiedades laxantes estimulan la pronta salida del meconio (primeras heces de color verdoso y textura pegajosa), que deja sitio libre para que crezca el estómago hasta ser del tamaño de su muñeca, hacia los 3-4 días.

En el caso de los bebés prematuros, aun es mas importante si cabe la lactancia materna, puesto que son bebés más inmaduros que necesitan todo lo que podamos ofrecerles, y la lactancia materna es, sin duda, una de las mejores cosas que podemos hacer por ellos. Es tan importante la leche materna en estos pequeños que los hospitales la 'recetan' a los bebés prematuros obteniéndola de los bancos de leche materna donada por otras madres. Ofreceremos la mejor tolerancia posible a la alimentación, disminuiremos las infecciones (algo que puede resultar vital en un prematuro) y además les daremos nuestro contacto, algo que está demostrado que ayuda enormemente a su recuperación (ver Método Madre Canguro). Si su edad es inferior a 34 semanas o pesa menos de 1.500 grs, es posible que no tenga suficiente energía para mamar directamente del pecho y lo tengamos que alimentar a través de una sonda/relactador con leche materna extraída. Lee esta guía antes de comprar un extractor de leche materna.
Más info.

En caso de cesárea, se puede y debería amamantar en el mismo quirófano. ES POSIBLE, con ayuda del personal.

Si no se permite el contacto piel con piel de inmediato (aun en quirófano), la leche tarda un poco más en subir por lo que es importante estimular más el pecho y no dar suplementos; toda la leche llega.

El principal estímulo que induce la producción de la leche es la succión del niño, por lo tanto, cuantas más veces se agarra el bebé al pecho de la madre y cuanto mejor se vacía éste, más leche se produce. Por este motivo es importante no ofrecer “ayudas” de biberón y realizar una lactancia a demanda, libre por completo de horarios. Hay que recordar siempre que a mayor estimulación, mayor producción. No necesitamos saber cuánta leche toma nuestro bebe si siempre que quiere lo ponemos al pecho, puesto que tomará siempre la que necesite y por tanto el pecho se adaptará a la producción que el bebé demande.

 (Click sobre la imagen para ampliar)

Es útil saber que el llanto es un signo tardío de hambre, por lo que no tiene sentido hacer esperar al bebe un tiempo determinado o regirnos por unas pautas horarias, engañarlo con chupetes u otros líquidos si lo que necesita es mamar y por tanto estimular el pecho para que adapte la producción a sus necesidades. Cada bebé tiene su propio ritmo y no ha de ser comparado con otros.

Cualquier mujer puede ser capaz de alimentar a su hijo exclusivamente con su leche. No existe la leche materna de baja calidad; ésta siempre es adecuada al bebé y es todo cuanto necesita. Casi ninguna mujer “no tiene leche” o no “puede dar el pecho”, ni está condicionada hereditariamente, tan sólo un 1% de las mujeres tienen un impedimento real que impida de verdad amamantar.
Se pueden dar causas excepcionales de hipogalactia (falta de leche), como la causada por una reducción mamaria o por otros factores puntuales. También es posible que el bebé no realice una succión eficaz por un problema de anquiloglosia o 'frenillo sublingual corto', que puede ser muy evidente o no, y ha de valorarlo una pediatra o asesora IBCLC cualificada, puesto que existen 4 grados, dos de los cuales no se conocieron hasta el 2009, y no todos los profesionales saben detectarlos. Este problema también tiene solución.


A menudo numerosos mitos y leyendas o malos consejos rodean la lactancia materna, que se ve afectada negativamente al no darle la importancia que merece o nos crean confusión y falsas referencias. Es importante descartar algunos de ellos, completamente falsos y sin ningún respaldo científico o médico que los avale, a menudo ocasionados por una información errada:
  • No hay (suficiente) leche durante los primeros 3 o 4 días posteriores al nacimiento del bebé.
  • La madre debe lavarse los pezones cada vez que vaya a alimentar a su bebé.
  • La extracción de la leche materna es necesaria para saber cuánta leche tiene disponible la madre.
  • Si la madre tiene una infección, la vacunan o se medica debe suspender la lactancia materna.
  • Si el bebé tiene diarrea o vómito, la madre debe suspender la alimentación con leche materna.
  • Una madre que amamanta debe comer mayor cantidad de alimentos para producir suficiente leche o ingerir una mayor cantidad de líquidos.
  • Una madre que fuma no debe amamantar a su bebé.
  • Los bebés prematuros, con labio leporino, paladar hendido o ambas cosas no pueden mamar.
  • Las mujeres con senos pequeños producen menos leche que aquellas con senos grandes.
  • Las mujeres con implantes mamarios o pezones planos no pueden lactar.
  • Puedes leer incluso el caso de una mamá con reducción de pecho que consigue amamantar con muchísimo esfuerzo (y la reducción si puede llegar a condicionar drásticamente la LM, pero también podemos intentar la lactancia mixta si no podemos producir la cantidad necesaria para que sea exclusiva)
Es importante, sobre todo al principio, que no se ofrezcan al niño chupetes ni biberones. Una tetina no se “chupa” de la misma forma que el pecho por lo que el recién nacido puede “confundirse” y posteriormente agarrar el pecho con menos eficacia. Esto puede ser la causa de problemas tales como grietas en el pezón, mastitis y falta de leche a la larga. Un recién nacido no rechaza el pecho (no puede, no lo conoce), lo que ocurre es que ha de aprender a mamar y hay que tener paciencia para que aprenda. Tampoco es recomendable utilizar pezoneras.

Las grietas surgen porque el niño se agarra mal al pecho o porque un frenillo dificulta el agarre y/o succión, así que lo importante es corregir la postura. El uso de pezoneras puede acortar la duración de la lactancia y además hacerla muy incómoda. La postura al dar de mamar es la clave del éxito: Cuando mama, la cabeza del bebé (y todo su cuerpo) estará más o menos inclinado según la dirección del eje del pecho, tendrá la boca muy abierta, el pecho metido hasta el fondo, los labios evertidos (es decir, el labio superior doblado hacia arriba y el inferior doblado hacia abajo). La nariz está cerca del pecho y el mentón suele tocarlo. La mayor parte de la areola está en la boca del bebé y el pezón de la madre enfoca hacia su paladar.
Imagen cedida por Sandra Caballero. Todos los derechos reservados.
Una mala posición puede causar grietas, dolor y puede hacer que el bebé no se sacíe y por tanto mame más a menudo de forma ineficaz o trague aire que le produzca cólicos. Consulta con una experta para corregir la postura.

Más sobre POSICIONES PARA DAR DE MAMAR y vídeo sobre AGARRE Y DOLOR

Resulta vital para la continuidad de la lactancia el apoyo de nuestro pediatra: Aparentemente, todos apoyan la lactancia materna, pero en la práctica muchos de ellos la apoyan solamente cuando las cosas van perfectamente bien y algunos ni siquiera en esos casos. Tan pronto como surge alguna dificultad, aconsejan suspender o suplementar. Algunas pautas para distinguir a los pediatras que apoyan la LM y los que no la apoyan:
  • Si nos entrega muestras de leche en polvo antes o después de dar a luz.
  • Si nos dice que la alimentación con leche materna o con fórmula son esencialmente iguales.
  • Si nos insinúa que una leche de fórmula determinada es mejor.
  • Si nos dice que no es necesario que alimentemos a nuestro bebé inmediatamente después de su nacimiento porque todavía estaremos cansadas y el bebé aún no tendrá interés en hacerlo.
  • Si nos dice que no existe la confusión de pezón y al mismo tiempo que debemos suministrarle el biberón desde temprana edad para que lo acepte.
  • Si nos dice que debemos suspender la lactancia materna cuando nosotras o nuestro bebe estemos enfermos, o cuando tomemos algún medicamento
  • Si nos dice que la leche materna no tiene valor nutricional después de los seis meses o se sorprende si nosotras aun lactamos.
  • Si nos dice que nunca debemos permitir que el bebé se duerma en el seno materno o nos impone horarios o pausas nocturnas.
  • Si nos dice que no es necesario que nos quedemos en el hospital para alimentar a nuestro bebé enfermo porque es importante que descansemos en casa. 
Imagen cedida por Noemí Genaro. Todos los derechos reservados.

Es muy importante que al niño se le ofrezca el pecho precozmente, a ser posible en la primera media hora tras el parto, puesto que es cuando están más receptivos y tienen más despierto el reflejo de succión. Después de la primera hora, el recién nacido suele quedar adormecido durante unas horas. Durante este tiempo, es recomendable que el bebé permanezca junto a su madre aunque no muestre interés por mamar y que se estimule el contacto piel con piel entre ambos, de gran importancia para los dos. (Más info desde www.quenoosseparen.info , una campaña financiada y avalada por el Ministerio de Sanidad y apoyada por numerosos colectivos profesionales de la salud, con evidencias científicas e información sobre los beneficios de la no- separación madre/bebé y el contacto piel con piel).

Es útil saber que se puede amamantar a mellizos (lactancia múltiple) o a dos bebés de diferente edad a la vez, se llama “lactancia en tándem” y hemos de recordar que la lactancia materna prolongada también tiene beneficios para nuestr@ hij@ y que no hay una fecha tope para amamantar.

Imagen cedida por Susana Cordeiro. Todos los derechos resevados.
También se puede relactar cuando se ha interrumpido la lactancia materna o no se ha ofrecido desde el nacimiento. De hecho, se puede amamantar incluso en caso de adopción y en este enlace puedes conocer la historia de África, que tardó tres semanas en conseguir las primeras gotas de leche, pero consiguió inducirse la lactancia desde cero para su bebé adoptado. [Puedes leer también Lactancia adoptiva o matrimonios lésbicos].
No dejes de leer la visión que se tiene sobre la lactancia materna en Mongolia, un excelente relato.

Volver al trabajo no ha de significar abandonar la LM, siempre podemos sacarnos leche, dejar las comidas sólidas para nuestra ausencia o mantener alguna toma. Tampoco tiene sentido "acostumbrar" al bebe al biberón para que lo acepte en nuestra ausencia laboral. Lee AQUI un extracto del libro "Un regalo para toda la vida" del pediatra Carlos González que habla sobre ello.

Si aun tienes dudas y eres más de ver que creer, aquí tienes especialmente para tí... "una imagen vale más que mil palabras" o puedes realizar este juego de 'Lactando Amando' para repasar conocimientos y conocer las respuestas correctas en caso de fallar.

En caso de tener dudas o algún problema, es vital no atender consejos que nos recomienden, de una u otra forma, dar suplementos o interrumpir la lactancia materna. Lo mejor es ponerse en contacto con nuestra comadrona, asistir a grupos de apoyo a la lactancia, buscar una asesora de lactancia cualificada (a ser posible IBCLC, que son las más actualizadas) o ponernos en contacto con alguna asociación pro-lactancia (suelen prestar ayuda telefónica gratuita).


MÁS INFORMACIÓN:
  • Sobre medicamentos compatibles/incompatibles:
e-LACTANCIA, portal creado por el Dr. José Mª Paricio y su equipo.
  • Algunas asociaciones pro-lactancia materna:
http://www.lacmat.org.ar/
http://www.dardemamar.com/
http://albalactanciamaterna.org/
http://www.asociacionsina.org/
http://www.aeped.es/comite-lactancia-materna
http://www.laligadelaleche.es/
http://www.e-lactancia.org/espanol/inicio.asp

http://www.vialactea.org 
Grupos apoyo LM en Catalunya 
Grupos apoyo IHAN
  • Otras webs útiles:
http://www.tecnicadelasonda.tk/
http://www.medela.es/E/index.php
9 cosas a tener en cuenta antes de comprar un extractor de leche
  • Lectura imprescindible: “UN REGALO PARA TODA LA VIDA”, Autor: Pediatra Carlos González. Ed.: Temas de Hoy. Con algunos datos que deberían ser actualizados.
  • Y una recopilación estupenda de la mano de Noelia Prieto, asesora de lactancia materna:
    -"Manual de lactancia materna" (Carlos González), el mismo libro que 'Un regalo para toda la vida' pero escrito un poco más técnico y con referencias para profesionales. Cortito y para hacerse una idea, nos vale. Pero lo mismo que el anterior, le falta actualizarse en algún capítulo.

    -"El arte femenino de amamantar" (La Liga de la Leche), un clásico que toda persone que asesore debería al menos conocer, aporta una visión bastante amplia. Hay algunos apartados que nos pueden resultar un poco ajenos o curiosos, por el cambio de cultura.
    -"El poder de las caricias" (A.Gómez Papí), esta preciosa lectura habla de lactancia y crianza, un libro fundamentalmente para madres, pero con algún detalle importante que no aparece en otros libros y que nos puede venir muy bien saber para asesorar. Este también triunfa porque transmite el trasfondo profundamente humano de Adolfo.
    -"Maternidad y lactancia" (Gro Nylander), otro manual clásico de lactancia, escrito por una experta ginecóloga, lo que le da ese toque femenino que no tienen los demás. También peca de algunas faltas de actualización, claro! pero bueno, son muy fáciles de detectar.
    -"Manual de lactancia materna, de la teoría a la práctica" (AEPED), este ya para asesoras, y para empezar la verdad es que está genial, muy completo e ilustrado... a ver, le sobra y le falta algún detalle, ninguno es perfecto, pero en conjunto muy recomendable. Ojo porque hay dos ediciones, la segunda mejorada y ampliada.
    -"Lactancia materna: una guía para la profesión médica" (R. y R. Lawrence), el tocho donde puedes encontrar casi todo... aunque requisito imprescindible ponerte el chip de lenguaje técnico, porque como su nombre indica está escrito para sanitarios. Aun así, yo cada vez le voy sacando más jugo... poquito a poco.
    -"Mastitis, el lado oscuro de la lactancia" (Juan Miguel Rodríguez), esta es mi lectura actual y estoy aprendiendo mucho, está genial tener una actualización recogida en un libro, porque en general todas deben irse haciendo en cursos y jornadas. 
  •  [Más recomendaciones bibliográficas]

Edición 2017:
He descubierto una web española donde realizan JOYAS de placenta, cordón umbilical, leche materna... e incluso cenizas. Si te interesa, se llama JOYAS DE LECHE by LETY


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Ultima actualización en Mayo' 13

 
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